Las Fuerzas Armadas de Ucrania han afirmado este jueves haber matado a más de 600 militares rusos en el marco de los combates registrados en el último día, marcados por la contraofensiva lanzada durante los últimos días por las fuerzas ucranianas en la Járkov, en el este del país.
El Estado Mayor del Ejército de Ucrania, en la red social Facebook, ha elevado el total de fallecidos entre las filas rusas a 51.250, sin que Moscú haya dado un balance oficial de bajas.
Asimismo, ha destacado que desde el inicio del conflicto, desatado el 24 de febrero por la orden de invasión dada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, han sido destruidos 2.112 carros de combate, 1.226 sistemas de artillería, 159 sistemas de defensa antiaérea y 305 lanzacohetes múltiples autopropulsados y blindados.
Por otra parte, ha señalado que también han sido destruidos 239 aviones, 210 helicópteros, 884 drones, 15 embarcaciones, 3.344 vehículos y tanques de combustible, al tiempo que han sido derribados 214 misiles de crucero. «El enemigo ruso sufrió las mayores pérdidas durante el último día en dirección a Donetsk», ha resaltado.
El Estado Mayor del Ejército ucraniano ha hecho hincapié además en que «el enemigo sigue centrando sus esfuerzos en estabilizar el control total sobre el territorio de la región de Donetsk, mantener los distritos temporalmente ocupados en Jersón, parte de Járkov, Zaporiyia y Mikolaiv».