El cardenal nicaragüense Leopoldo Brenes vio “desmejorado” al obispo Rolando Álvarez, arrestado este viernes a la madrugada por agentes policiales que irrumpieron a la fuerza en la curia episcopal de la Diócesis de Matagalpa, donde estaba confinado desde hacía 15 días, en medio de una escalada estatal contra la Iglesia Católica.
“Si bien su condición física está desmejorada, su ánimo y espíritu están fuertes”, afirmó la Arquidiócesis de Managua, que dirige el cardenal Brenes, en una declaración pública.
La Arquidiócesis de Managua explicó que Brenes “tuvo la oportunidad de visitar y conversar con monseñor Álvarez en su residencia familiar”, donde se encuentra bajo “resguardo domiciliario” por la Policía Nacional, en la que patentizó “su estima fraterna en nombre de nuestra iglesia nicaragüense”.
Según la Arquidiócesis, Álvarez le manifestó al cardenal nicaragüense “su confianza en la oración de todos ante esta difícil situación que vivimos en comunión eclesial”.
“Conscientes que la oración es la fuerza del cristiano, invitamos a continuar implorando a Cristo que interceda y vele por éste su pequeño rebaño”, abogó.
“Esperamos que la razón, así como el entendimiento respetuoso, abran camino a la solución de esta crítica y compleja situación para todos”, agregó
Hace unos días, Rolando Álvarez pidió a la policía de Nicaragua que lo dejen en paz
La Arquidiócesis de Managua dijo que es un acontecimiento triste
La Arquidiócesis de Managua también reiteró “su solidaridad y cercanía con la hermana Diócesis de Matagalpa, ante el acontecimiento triste vivido la madrugada de hoy (viernes)”, particularmente con el obispo Álvarez, los sacerdotes y laicos que le acompañaban.
Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, ambas en el norte de Nicaragua, fue arrestado dentro del Palacio Episcopal provincial, junto con cinco sacerdotes, dos seminaristas, y un camarógrafo, tras 15 días confinados.
La Policía de Nicaragua confirmó que “la madrugada de hoy (viernes) se realizó, en las instalaciones de la Casa-Curia de la ciudad de Matagalpa, un operativo que permitió recuperar la normalidad para la ciudadanía y las familias matagalpinas”.
“Durante varios días se esperó con mucha paciencia, prudencia, y sentido de responsabilidad una comunicación positiva del Obispado de Matagalpa, que nunca llegó a darse y que, al persistir las actividades desestabilizadoras y provocadoras, hizo necesario el citado operativo de orden público”, indicó.
La Policía dijo que “las personas que permanecían en esa Casa-Curia fueron trasladadas, con respeto y observación de sus derechos, a la ciudad de Managua para las indagaciones de Ley”.
“El Señor Obispo (Álvarez) se mantiene en resguardo domiciliar en esta ciudad capital y ha podido reunirse con sus familiares esta misma mañana (de viernes)”, afirmó.
Asimismo, la Policía informó que el cardenal Brenes visitó a Álvarez “y ambos han conversado ampliamente”.
En tanto, los demás detenidos “fueron trasladados a Managua y continúan cumpliendo las diligencias respectivas en la Dirección de Auxilio Judicial”, donde funciona la cárcel conocida como “Chipote”, agregó.